lunes, 4 de diciembre de 2017

AVES VISTAS EN EL PASEO ORNITOLOGICO DEL SABADO 2 DE DICIEMBRE

Listado de aves oídas y observadas en la salida al parque Amate 02-12-2017: Cotorra de Kramer Psittacula Krameri/ Cotorra argentina Myopsitta Monachus/ Gorrión común Passer Domesticus/ Mirlo común Turdus merula/ Verderón común Chloris Chloris/ Mosquitero común Phylloscopus Collybita/ Lavandera blanca Motacilla Alba/ Colirrojo tizón Phoenicurus Ochruros/ Tórtola turca Streptopelia Decaocto/ Curruca capirotada Sylvia Atricapilla/ Reyezuelo listado (3 ejemplares en grupo) Regulus Ignicapilla/ Estornino negro Sturnus Unicolor/ Petirrojo común Erithacus Rubecula/ Gaviota sombría-patiamarilla Larus Spp/ Bisbita común Anthus Pratensis/ Pinzón vulgar Fringilla Coelebs/ Jilguero lúgano Spinus Spinus/ Jilguero europeo Carduelis Carduelis/ Carbonero común Parus Major/ Agateador común Certhia brachydactyla/ Como tantos primeros sábados de mes este 2 de diciembre los compañeros de Seo Sevilla y de la Asociación de Amigos del Parque Amate nos dimos cita en la puerta de este lugar para observar algunas aves urbanas, esas especies que comparten nuestras ciudades y jardines pasando inadvertidas en muchas ocasiones. El frío día invernal con algo de viento mermó nuestro número y sólo asistimos cinco personas, pero en compensación también eran menos los visitantes del parque por lo que pudimos disfrutar de más tranquilidad de lo habitual. Ya en la misma puerta nos sobrevolaron la cotorra argentina y la de Kramer en diferentes momentos, dos especies de aves exóticas que han llegado a nuestros parques y jardines por accidente y que cada vez son más abundantes. También de forma casi inadvertida nos pasó por encima un autóctono verderón común. Al contrario de lo que ocurría en otoño cuando los petirrojos desgranaban su canción por doquier en esta ocasión estaban prácticamente en silencio pues ya los individuos invernantes habían delimitado sus territorios de alimentación y se habían asentado. No había pues necesidad de cantar ya. A pesar de todo algo sí se oía de vez en cuándo. Nos sorprendió el metálico “pin pin pin” de varios de los abundantísimos mirlos de la zona alarmados por algún gato o cernícalo a la par que una lavandera voló asustada. Hasta los estorninos, normalmente muy charlatanes, estaban casi mudos, pero de vez en cuándo dejaban oír alguno de sus chirridos y silbidos discordantes. También alguna garrula cotorra emitía sus potentes gritos mientras se desplazaba con su ágil vuelo desde los lugares de descanso a los de alimentación. Gorjeaban los simpáticos gorriones mientras exploraban la zona de merenderos en busca de algo que comer. Dado que esta tenaz y tan nuestra especie de pajarillo empieza a ser cada vez más escasa en muchas ciudades nos alegramos de poder contar con una población relativamente sana aquí. Seguía el paseo y un agudo reclamo llamó nuestra atención. Salimos del camino y entramos parque a través para intentar la observación de una especie de ave poco común por aquí, y efectivamente pudimos lograr su avistamiento. Nada menos que un grupito de tres reyezuelos listados, los pájaros más pequeños de Europa, revoloteaba por unas coníferas como es común en la especie y se dejó ver a placer a pesar de sus inquietos movimientos. Pero el espectáculo no acabó ahí ya que un macho de colirrojo tizón, la bandera rojiza de su cola contrastando con el resto de su plumaje casi negro, se posó cerca de nosotros siendo expulsado casi al instante por un aguerrido petirrojo que no deseaba su presencia allí. Seguimos caminando por el parque y oímos varias currucas capirotadas. En otoño esta especie es abundante pero como los arbustos del parque ofrecen pocos frutos la mayoría de ejemplares se marchan una vez acabada la magra cosecha. A pesar de eso pudimos observar una hembra que buscaba refugio y comida en un tupido matorral. Algunos jilgueros también vagaban por la zona picoteando semillas de plantas en los árboles y en el suelo mientras un fugaz lúgano pasó volando a larga distancia. Esta última ave es rarísima en el parque pero este invierno ha habido una fuerte entrada de ejemplares en nuestro país por las especiales condiciones del año y alguno se puede ver. El sol calentaba algo más y las lavanderas blancas empezaron a verse con más asiduidad caminando por el suelo con su estampa de señorita presumida mientras buscaban insectos en éste. También se escuchaba la llamada de vuelo del más tímido bisbita. Un pequeño y aterciopelado mosquitero común se posó por un instante en una valla dándo a penas tiempo a verlo. En la lejanía un carbonero común cantó pero sin dejarnos ver su colorido plumaje. Volvimos a pasar por una zona de altas palmeras cuyos rectos troncos suelen ser zona de campeo de un peculiar pajarillo, el agateador común. Aunque llegamos a oír su brillante llamada no tuvimos el placer de poder observar su pequeñña figura recortada contra un tronco trepando como un juguete de cuerda mientras busca con su pico fino y curvo insectos en las grietas de la corteza. En cambio nos sobrevoló un verdecillo casi en silencio, estado en el que sólo permanece en las épocas más crudas del año. Cerramos el paseo con un petirrojo que se posó en el suelo atraído por alguna golosina, su aspecto ya de por sí regordete resaltado por el frío que le hacía ahuecar su plumaje, lo que le daba un aspecto realmente enternecedor. Es curioso que se vieron a lo largo de la jornada varios colirrojos tizones que permitieron una buena aproximación, lo cual está bien porque eran protagonistas del cartel que anunciaba esta salida.

1 comentario:

Alberto Escalante dijo...

Estimados amigos de la Asociación Amigos del Parque Amate: lo primero, felicitaros por la preciosa labor y bonitas actividades que realizáis.

Mi nombre es Alberto, soy vecino de Rochelambert desde hace 40 años, amante de la naturaleza en general y ligeramente iniciado en Botánica y Ornitología. Sé que es rarísimo contactar con vosotros así (podéis reíros), pero es que llevo media hora dándole vueltas al blog y no encuentro datos de contacto por ninguna parte!!!! Me gustaría conoceros, participar de vuestras actividades y aportar,en la medida de lo posible, mi granito de arena para hacer de nuestro parque un espacio cada vez más bonito y rico en todos los sentidos.

Agradecería algún dato de contacto. Aquí está mi dirección: albertoescalantezabala@gmail.com

Mil gracias

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